El tiempo que lleva películas y bolsas biodegradables descomponerse puede variar significativamente dependiendo de diversos factores como las condiciones ambientales, la composición del material y la presencia de microorganismos. Si bien los plásticos biodegradables están diseñados para descomponerse más fácilmente que los plásticos tradicionales, el proceso de descomposición aún puede tardar semanas o meses y, a veces, más. Aquí hay algunas consideraciones generales:
Condiciones de compostaje:
Las películas y bolsas biodegradables suelen estar diseñadas para descomponerse más rápidamente en condiciones específicas, como las que se encuentran en las instalaciones de compostaje industrial. En dichas instalaciones, donde se controlan la temperatura, la humedad y la actividad microbiana, el proceso de descomposición puede ser relativamente rápido y, por lo general, demora entre algunas semanas y algunos meses.
Compostaje casero:
En un entorno de compostaje doméstico, el tiempo de descomposición puede variar. Factores como el tamaño del material, la temperatura de la pila de abono y la presencia de los microorganismos adecuados pueden influir en la rapidez con la que se descomponen las películas y bolsas biodegradables. Pueden pasar varios meses hasta que se produzca una descomposición completa.
Condiciones del vertedero:
En un vertedero, donde las condiciones no son propicias para una rápida biodegradación, el proceso puede ser significativamente más lento. La falta de oxígeno y actividad microbiana en muchos vertederos puede impedir la descomposición de materiales biodegradables. En tales casos, el tiempo de descomposición puede ser más prolongado y potencialmente extenderse a años.
Ambientes Marinos:
La descomposición de los plásticos biodegradables en ambientes marinos puede variar. Si bien algunos materiales biodegradables pueden descomponerse más rápidamente en condiciones marinas en comparación con los plásticos tradicionales, la presencia de agua salada, las bajas temperaturas y la actividad microbiana limitada aún pueden ralentizar el proceso.
Composición del material:
La composición específica del material biodegradable puede afectar las tasas de descomposición. Algunos materiales se descomponen más fácilmente que otros y la presencia de aditivos o recubrimientos puede influir en el proceso general de biodegradación.
Tamaño y espesor:
El tamaño y espesor de la película o bolsa biodegradable también pueden afectar la descomposición. Los materiales más gruesos pueden tardar más en descomponerse y los artículos más grandes pueden tener tasas de descomposición desiguales.
Es esencial tener en cuenta que el término "biodegradable" no implica necesariamente una descomposición instantánea o universal. La eficacia de la biodegradación depende de múltiples factores y su eliminación adecuada en el entorno previsto es crucial. Además, las normas y certificaciones (como las de ASTM, EN y los organismos de certificación de compostabilidad) a menudo especifican las condiciones y plazos bajo los cuales se mide la biodegradación.
Cuando se utilizan películas y bolsas biodegradables, es importante seguir los métodos de eliminación recomendados, ya sea que se trate de compostaje industrial, compostaje doméstico u otros métodos específicos. Los consumidores y las empresas también deben conocer la infraestructura de gestión de residuos disponible en su área y elegir productos que se ajusten a las opciones de eliminación disponibles.